viernes, 29 de enero de 2010

Oración del siglo XV contra la inseguridad

Dios todopoderoso que has sufrido la muerte en el árbol de la Cruz de Jesucristo, por tu Cruz y tu preciosa Sangre, aparta de mí toda arma cortante, de fuego y todo explosivo.

Señor Jesucristo, por tu Cruz y tu preciosa Sangre, vierte sobre mí todo bien.

Señor Jesucristo, por tu Cruz y tu preciosa Sangre, aparta de mí todo mal.

Señor Jesucristo, por tu Cruz y tu preciosa Sangre, procúrame la salud.

Señor Jesucristo, por tu Cruz y tu preciosa Sangre, aparta de mí todo atentado de muerte.

Señor Jesucristo, por tu Cruz y tu preciosa Sangre, guárdame de accidentes corporales y temporales, y que yo adore la santa cruz de Jesucristo para siempre.

Jesucristo de Nazaret Crucificado, ten piedad de mí, por todos los siglos de los siglos.

Líbrame de los ladrones, malhechores y de todas las personas que intenten acercarse con malas intenciones, dentro o fuera de casa.

Haz que el espíritu maligno se aparte de mí.

1 comentario:

Romanista dijo...

Esta oración la encontré impresa en casa de familiares y venía acompañada de promesas. Sin embargo al no encontrarla en internet, y al encontrar una pero con bastantes diferencias, decidí no publicar las promesas.

Saludos
Matías